Desafio de la literatura en la escuela

Erika Bernal Rozo

Tradicionalmente la lectura literaria en la escuela se ha relacionado a la acción mecánica de leer una libro asignado por el maestro y la realización de un resumen que da cuenta de la lectura y de los personajes; pocas veces se pregunta por la vivencia del lector frente a lo leído, de hay que la lectura literaria resulta muchas veces más una experiencia obligatoria, aburrida y dolorosa que una experiencia placentera y enriquecedora. Es por eso que como docentes debemos cuestionarnos. ¿Frente a los desafíos que se plantan en la actualidad podemos ensenar literatura de otra manera? La lectura precisamente se llama “desafío de la literatura”, es decir, como dejar de ver la literatura como un simple cúmulo de documentos escritos y verla como una fuente que aviva nuestras emociones, ejercita nuestros sentidos, la que nos permite disfrutar de la hermosura y la grandiosidad de la naturaleza el esplendor exótico de los paisajes en tierras y lugares remotos, además como ésta puede brindarnos experiencias que de otra forma no podríamos disfrutar, a través de la literatura se puede vivir la acción la aventura, nos permite conocer otros mundos viajar a otros países conocer a personas cuyas vidas nos enriquecen y adquirir conocimientos prácticos que nos ayudan a afrontar las inquietudes de la vida. La lectura de obras literarias nos ofrece un camino más rico, más seguro y, por supuesto, mucho más divertido. El docente por su parte al ir explorando estos caminos con los estudiantes debe tener conocimientos generales y conceptos claros en áreas relacionadas como la psicología, sociales y ética para ayudar a entender la presentación de los personajes por parte del autor, que tipo de valores, de conceptos, de mentalidad quiere que el lector capte, este es un buen ejercicio para fomentar una discusión literaria en donde el estudiante exponga, sus puntos de vista desde una enfoque crítico. La clase de literatura puede estimular a los estudiante a desarrollar por si mismos un enfoque reflexivo sobre el comportamiento humano, sobre los diferentes aspectos y estructuras económicas, sociales y políticas que han pautado la vida del ser humano a través de la historia y como estas se relacionan e influyen en la actualidad en su contexto en su entorno en su vida real. ¿Qué provoca la lectura literaria en la realidad del lector? Lleva al lector por un viaje a través del pasado, de su lenguaje, de su vida, a través de imágenes, frases, palabras, acciones. Determinando lo que la obra le comunica a él. El lector por su parte aporta su personalidad, sus recuerdos lo que lleva a una fusión con el texto. Tanto estudiantes como docentes tenemos planteado un desafío y ese es el desafío de dejarnos afectar por la riqueza literaria, dejar que esta sea una experiencia enriquecedora que mueva nuestras emociones, pensamientos e ideas que despierte en nosotros nuestra sensibilidad literaria, conciencia social, que nos lleve a ser reflexivos, observadores, creativos, críticos de nuestra realidad. Es preciso como docentes desarrollar diferentes metodologías para afectar a los estudiantes y promover la lectura literaria comprensiva y gozosa.