ESTUDIANTE: MARÍA JULIA PÁEZ MARÍN
ANÁLISIS DE LA CEGUERA
(JOSÉ SARAMAGO)
Para comenzar deseo confesar que la primera impresión que me lleve al leer el titulo de la obra fue que se trataría de la rutina diaria de un ciego. Y ahora que acabo de leer el libro debo aceptar que mi apreciación fue demasiado miserable y a su vez es un claro ejemplo de lo que Saramago desea representar en su obra y esa forma tan superficial en que estamos acostumbrados a mirar las cosas. El análisis de la ceguera es un claro ejemplo de los diferentes juegos en que ha caído nuestra sociedad y pienso esto porque por décadas hemos sido sujetos a comportarnos dentro de unos estándares impuestos, puede que muchas de las veces no hayamos estado de acuerdo, pero hace parte del protocolo que hay que “manejar”, comportarnos diferente o decir algo inusual puede ser contradictorio, y nos la pasamos con una mascara invisible ante los demás, que nos aleja de ser quienes verdaderamente somos, y vamos por ahí dando la mejor impresión posible, callando lo que en ocasiones agita nuestro espíritu a punto de sentir que vamos a reventar, vivimos en una hipocresía lamentable que nos ha enseñado a mirar el mundo y las situaciones de nuestra vida de una forma banal, fría y superficial. Y nos avergüenzan ante los demás muchas cosas que pensamos y sentimos, que si muy seguramente demostráramos dirían mas de nosotros mismos que cualquier autobiografía, hay miedo de expresar cuando estamos tan acostumbrados a omitir, a callar, somos el producto de miles de estigmas que nos reducen, que no han simplificado por completo a ser una sombra mas de tantas. Y cuando en un caso extremo como en el libro que era la ceguera, el humano saca a relucir todo lo que es, incluyendo su instinto animal, nos damos cuenta que realmente sabemos muy poco de nosotros mismos y por supuesto de todas esas personas con las que vivimos y tratamos. Estamos rodeados de límites internos que son absurdos que nos alejan de la realidad, de ser quienes realmente somos, porque solo vemos lo que queremos ver, o lo que en la mayoría de casos nos conviene. Y solo nos gusta mostrar lo bonito, o lo que es considerado como adecuado, porque en nuestro interior existe el miedo terrible al rechazo, a la reprobación de estar dentro de la cuadricula social que nos hemos encargado de reproducir a escalas impresionantes. Pero estamos aun ha tiempo de aventurarnos a conocernos, a explorarnos, pero realmente, comenzando por todas esas emociones, pensamientos e instintos que por mas de una vez se nos han colado en lo mas profundo de los huesos y que hemos tenido que ignorar o reprimir porque al enfrentarlas nos damos cuenta que somos diferentes a lo que mostramos y a lo que los demás pueden ver, es decir que es una de las tantas versiones que hemos hecho de nosotros mismos para agradar a los demás, o para huir de nosotros mismos .
Es decir que no solo se es ciego por carecer de visión, sino por estar lleno de sofismas que no nos han permitido ver y conocer ese ser que realmente somos y mucho menos el enfrentarnos con nuestras propias debilidades y grandezas, con esos instintos únicos y emociones tan indescriptibles que encierra el verdadero significado del ser humano. No restrinjamos mas esa delicia que implica el conocernos, el expresarnos, sujetos al terror de no conocer, ni aceptar realmente el universo que cada ser humano tiene en su interior, la realidad no la podemos seguir limitando a lo que vemos y conocemos, esta experiencia va muchísimo mas allá de eso.También sobresale en esta obra la perdida de la moral, pues al no ser vistos cada uno hacia lo que quería, y es lo que actualmente sucede, pues estamos inmersos en una sociedad que solo ve lo que le conviene a pesar de que físicamente no somos ciegos, nuestra alma y nuestro cuerpo están ciegos porque aun no hemos aprendido a ver el interior de las cosas, y mucho menos a ver con los demás sentidos…
TEXTOS PUBLICADOS
¿SON NUESTROS CUERPOS REPRIMIDOS DE UNA EPOCA?
FORMA DESEADA, DESEAMOS Y SOMOS CUERPOS DESEANTES?
sábado, 4 de octubre de 2008
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